DE GUARDIANES
Imágen de Internet.
Mi pequeño balcón tiene la niebla
prendida en exclusiva
se resiste a dejarla escapar,
a que el sol de realce a los patos del lago,
a la farola opaca de inclemencias,
o a los enamorados
que se arrullan impasibles al frío
en un rincón del parque,
como si pretendiera
conservar los silencios,
para cuando me habiten los días farragosos
y sus dientes.
Luisa Arellano 03 diciembre 2016
4 comentarios:
Precioso poema que dedicas a este hermoso mes navideño.
Un abrazo desde Cataluña. de un alcantarino tu segundo pueblo.
Gracias, Pablo, paisano. Me alegra que te guste. Abrazos.
Bellísimo, Luisa.
La niebla tal vez, y a veces, también nos protege del agresivo sol...
Milbesos, poeta
Así es Soco... los guardianes están por doquier.... y no siempre reconocemos su presencia. ¡Abrazo enorme.
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